¿Crees que tienes la vida que siempre has soñado?
Quizás alguna vez te has parado a pensar por qué te suceden ciertas cosas, si estás haciendo bien,... puede que estos pensamientos te hayan llevado a plantearte si realmente eres feliz, si tienes lo que te mereces, o si mereces más de lo que consideras que tienes.
En estos tiempos donde las redes sociales , l@s influencers y los filtros captan casi toda nuestra atención, pensar y/o desear lo que otr@s nos muestran, nos incapacita para disfrutar de lo que tenemos.
Últimamente escucho mucho la expresión "siento envidia sana". ESO NO EXISTE.
El lenguaje o la manera en que nos hablamos a nosotros mismos, hablamos a los demás, o nos justificamos, será objeto de otro post; pero te adelanto que la envidia bajo ningún concepto es una emoción que genere sentimientos positivos.
La ENVIDIA es una emoción ridícula ya que sólo causa sufrimiento y frustraciones.
Por otro lado, la HUMILDAD es una fortaleza motriz 100% positiva.
Ser humilde conlleva ser sinceros con nosotros mismos, conocer nuestras virtudes, reconocer nuestras limitaciones, SIN JUZGARNOS por tenerlas, y sobre todo, comprender que ser nosotros mismos, con nuestros defectos y nuestras virtudes, es la tarea más importante para ser feliz.
Ser HUMILDE por tanto es una tarea de AMOR PROPIO con consecuencias que benefician a quienes queremos y nos rodean. Y es una tarea que nos exige dedicarnos tiempo a nosotros mismos.
TÚ eres lo más importante de tu vida.
Incluso si tienes hij@s, insisto, TÚ eres y debes ser lo más importante, porque si no te cuidas, tampoco podrás cuidar a quienes quieres y te importan, siendo feliz.
Cuando nos dedicamos tiempo aprendemos a respetarnos y aprendemos a valorarnos sin tener que compararnos con nadie.
Aprendemos a admirar de manera positiva a otr@s, alegrándonos por sus éxitos y aprendemos a no castigarnos o sufrir por no tener la misma estrella.
Aprendemos a motivarnos por mejorar y aprendemos a sacar aspectos positivos incluso de los momentos más complicados.
Y todo eso suma, nos aporta valor y nos hace aportar valor a los demás.
¿Te ha gustado este post?
Estaré encantada de leer tus comentarios.
Patricia
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